Por Ian Sanders


Para la generación de nuestros padres, el "trabajo" era un lugar al que la gente iba. Decir “oficina” era igual a “trabajo”; “casa” significaba estar “fuera de servicio”. Hoy los límites están difusos: el trabajo es una mentalidad, ya no es un lugar al que vamos.

Este nuevo mundo de trabajo presenta oportunidades y desafíos tanto para las empresas como para los colaboradores.

Dejé mi trabajo como director general de una pequeña empresa hace 18 años. Desde entonces, he forjado una vida laboral ágil e independiente como asesor creativo. Durante este tiempo, he presenciado y experimentado cambios significativos en la forma en que trabajamos. La tecnología cambió la relación con nuestros trabajos. Las prácticas de trabajo y los espacios de oficinas se han transformado. La importancia de la cultura organizacional ha escalado al top 5 de prioridades. En primer lugar cambié un espacio de oficina fijo por una combinación de cafeterías y espacios de trabajo conjunto para mantener el negocio ágil. Opté por seguir mi curiosidad en lugar de cumplir con un plan a largo plazo, ahora esto es más común en la vida organizativa. Adoptar un nuevo enfoque de trabajo puede ayudar a los líderes empresariales del mercado intermedio a hacer que sus organizaciones estén más preparadas para el futuro. Es una oportunidad para crear lugares de trabajo donde los empleados se sientan animados para hacer su mejor esfuerzo. Además, inyectar nuevas ideas y prácticas de trabajo asegurará que sus negocios tengan una visión de futuro, lo que les dará una ventaja sobre sus competidores. Jean Stephens, CEO de RSM International, firma global líder de auditoría, impuestos y consultoría, escribió recientemente, “un desafío para las empresas del mercado medio es la lucha constante por encontrar y retener a los empleados más capacitados e innovadores”. Ella considera que la clave para atraer y mantener el talento es crear organizaciones amigables con las personas donde los mejores empleados deseen trabajar. Ese es el santo grial para la mayoría de los líderes empresariales, pero ¿cómo se puede lograr eso? A continuación seis formas en que las empresas del mercado medio no solo sobreviven, sino que prosperan en este nuevo mundo de trabajo.

  1. Conoce tu ingrediente secreto: ¿Cómo se crean espacios de trabajo donde las personas estén motivadas? En primer lugar, protege la cultura. Daniel Coyle, autor del Código de Cultura, escribe que "una cultura bien manejada, puede crear la magia". En ocasiones, el concepto de cultura organizacional puede sentirse como una gelatina, difícil de atrapar. Pero como lo describe Coyle, la cultura se basa de hecho en un conjunto muy real de comportamientos y mejores prácticas. Captura la cultura de tu empresa descubriendo primero qué es lo que hace que trabajar en ella sea único y especial. Escríbelo y publícalo. Y luego utilízalo como una piedra angular para todos los miembros de la organización, de modo que quede claro lo que se espera de cada uno de ellos. Después de todo, la cultura no es algo que tienes, es algo que haces.
     
  2. Libera a tus empleados de sus escritorios. La mayoría de los ejecutivos no tienen sus mejores ideas en el escritorio, pero ¿por qué tantas culturas de trabajo no alientan a los empleados a moverse dentro y fuera de la oficina durante la jornada laboral? El movimiento físico combinado con la estimulación de diferentes entornos conduce a una mayor productividad y creatividad. El movimiento de fluidos en el cuerpo desencadena el movimiento de fluidos en el cerebro. Permite que los empleados se sintonicen en donde hacen su mejor trabajo, como el café para ponerse al día de manera informal. O salir para tener una reunión durante una caminata puede ayudar a lograr mucho más.
     
  3. Crea espacios de trabajo más humanos. Afortunadamente, la mayoría de las empresas se han dado cuenta de la importancia del entorno adecuado. Espero que las oficinas amuebladas con pisos grises y paredes beige sean una cosa del pasado. Pero no se puede simplemente instalar una mesa de ping pong y una máquina de café espresso y esperar que todos se energicen de la noche a la mañana. Inspírate en aquellos que lo hacen bien, como Second Home, un espacio de trabajo conjunto diseñado por los arquitectos españoles, José Selgas y Lucía Cano. Este espacio de trabajo conjunto tiene mucha luz natural, cada tabique interno es transparente y hay plantas y árboles por todas partes.
     
  4. Fomenta el espíritu de equipo en lugar de depender simplemente de las herramientas digitales. Las aplicaciones como Slack han revolucionado la comunicación interna, sin embargo, nada mejor que reunir a todos en un solo lugar. Después de todo, los canales digitales tienen un límite. Pasar horas en reuniones no es la respuesta, pero sí lo es un enfoque más humano. Por ejemplo, comer juntos puede ayudar a construir el espíritu de equipo. Es vital reunir a los colaboradores o equipos remotos de varios sitios en la misma sala.
     
  5. Estimula la curiosidad: permite que los empleados salgan de su burbuja. Anímalos a ser inquisitivos sobre el mundo que los rodea. Un espíritu de curiosidad puede ayudarnos a pensar los problemas de manera diferente y encontrar soluciones más creativas e innovadoras. Una forma de hacerlo es pasar el tiempo caminando en los zapatos de tus colaboradores o clientes. Otra es descubrir aprendizajes de diferentes campos. Howard Schultz regresó como CEO de Starbucks en 2008 en un momento en que la compañía se había perdido y el alma de la marca estaba en riesgo. Schultz sabía que la empresa necesitaba volver a poner al cliente en el centro de todo lo que hacía. Su equipo de administración se sumergió en algunos de los minoristas locales de Seattle. El propio Schultz conversó con una mujer que sirve queso en el mercado de alimentos de la ciudad. Su experiencia y pasión lo impresionaron, especialmente porque ella había estado trabajando allí solo seis meses. Esa experiencia impulsó un ejercicio de reentrenamiento en toda la empresa. Todas las 7,000 tiendas de Starbucks estuvieron cerradas durante tres horas y media para que los baristas pudieran ser entrenados para hacer el espresso perfecto.
     
  6. Aprovecha tu propósito y tu historia. ¿Cómo animas a los colaboradores a hacer un esfuerzo adicional? "Energía discrecional" es la energía adicional que se aplica a la tarea en cuestión cuando realmente nos importa algo, como un pasatiempo o un proyecto paralelo. También se puede aprovechar en el trabajo. Iluminar el propósito y la historia de tu organización, puede crear un fuerte compromiso emocional con su fuerza laboral que liberará esa energía discrecional. Gerry Anderson, de DTE Energy, dijo al podcast Ideacast de Harvard Business Review sobre un momento en que sus empleados no estaban haciendo todo lo posible. Anderson trató de sacudir las cosas con el entrenamiento. Los resultados fueron decepcionantes. Luego, cambió su enfoque. Llamó a todos y les dijo que las cosas eran tan terribles que las personas podrían ser despedidas. Añadió que la compañía iba a hacer todo lo posible para evitar que eso suceda. A cambio, pidió a todos que trajeran al trabajo "una energía e intensidad y un nivel de creatividad que nunca antes había tenido". Mes a mes, la compañía comenzó a superar el presupuesto. Fue un cambio completo. "Si quieres que una empresa sea excelente, debes recurrir a la energía discrecional de la gente, a su energía extra", dice Anderson. Durante los períodos de cambio organizacional, informa a tus colaboradores sobre la situación en la que se encuentras, lo bueno y lo malo, todo. Involúcralos. Si están lo suficientemente comprometidos, podrían marcar la diferencia en el desempeño de la empresa.