Rhonda Klosler,
Jefa de operaciones en RSM Canadá

Cada vez vemos más historias de éxito alrededor de empresas que se están haciendo globales o que se están uniendo a una red empresarial con alcance internacional. Ser parte de una organización global ofrece muchos beneficios: acceso a diferentes “talent pools” (bases de datos donde los departamentos de Recursos Humanos tienen a los candidatos con los mejores perfiles), más oportunidades para nuevos negocios, más recursos y capacidades, y por supuesto, amplitud internacional para los clientes.

Pero apostar a lo global requiere que las organizaciones trabajen más para mantener su identidad. Como cualquier nueva relación, ambas partes deben comprender sus roles. ¿Son la opción más adecuada la una para la otra? ¿Ambas quieren las mismas cosas sin tener que sacrificar su identidad? Los objetivos de las dos firmas deben estar alineados.

Hace apenas un año, la oficina de Toronto, donde soy socia y gerente, se volvió parte de RSM, firma global de auditoría, impuestos y consultoría. RSM quería estar en Canadá porque reconoció una oportunidad de servir en el mercado medio del país. Mientras que nosotros queríamos mejorar nuestros recursos en una escala internacional- algo esencial para cumplir con las necesidades de nuestros clientes, que también estaban creciendo. Nuestras metas estaban alineadas.

Para prepararnos para el éxito, tuvimos que aprovechar nuestras nuevas ventajas sin perder los diferenciadores clave que hicieron a nuestro negocio tan exitoso.

EXPLÍCALE A TUS EMPLEADOS LAS RAZONES DEL CAMBIO

Las primeras semanas de formar parte de una organización global es una experiencia de aprendizaje. Muchas firmas en esta situación se darán cuenta de que trabajan en la misma oficina, entre los mismos colegas, atendiendo a los mismos clientes. Sin embargo, detrás de cámaras todo es diferente. Uno de los beneficios clave de unirse a una firma global es tener la habilidad de acceder y compartir recursos entre oficinas, así que buscamos las formas de integrar a nuestra gente, nuestras finanzas y sistemas de comunicación. Todo lo que sabíamos sobre cómo operábamos y administrábamos el negocio cambió.

Para ayudar con la transición, las empresas deben invertir tiempo y recursos en capacitación y educación. Traer expertos desde las oficinas globales es indispensable. Los empleados necesitan ser parte de este proceso y entender por qué está sucediendo este cambio. Esto significa ser ultra-transparentes con los objetivos empresariales. Mantener a los colaboradores comprometidos significa que todos en la organización deben entender su rol y sentirse parte del equipo.

DEBES MANTENER LO QUE TE HACE ESPECIAL Y ÚNICO

Así como muchas nuevas firmas globales aprenden rápido, lo que funciona en un mercado podría no servir en otro. Cuando abrimos tres oficinas en Alberta sabíamos que no podríamos hacer todo de la misma manera. Mientras que los procesos y sistemas necesitaban ser estandarizados para ser eficientes, los negocios no pueden tener un solo enfoque cultural. Cada eslabón de una cadena global debe jugar con sus propias fortalezas.

Antes de convertirnos en RSM Canadá, competimos con firmas mucho más grandes al ser ágiles y saber reaccionar. Es como manejar un buque petrolero, algunas veces puede ser más difícil para jugadores grandes moverse y ser ágil. Las firmas globales necesitan resolver cómo mantener su agilidad y conocer sus ventajas en el mercado. Mientras que crecen en tamaño, escala y experiencia, las organizaciones necesitan tomar decisiones conscientes para mantener el espíritu independiente, flexible y de emprendedor por el que las empresas pequeñas son típicamente reconocidas.

Lo mismo puede decirse cuando se habla de cultura. Considerando que “cultura” es esencialmente la forma en cómo la gente interactúa entre ella y con los clientes, es natural que cambie y evolucione con el tiempo.

BUSCA RELACIONES A TRAVÉS DE LA ORGANIZACIÓN 

Los negocios no deberían esperar que al integrarse a una plataforma global, los beneficios sean inmediatos. Queda en manos del líder de la empresa integrar las nuevas oficinas a la organización y cultivar activamente nuevas relaciones a través de la compañía. Los líderes necesitan llegar a conocer a los líderes de otras oficinas. Mientras que nuestro equipo canadiense anticipó que unirse a RSM podría influenciar de manera positiva nuestra cultura, no anticipamos que nosotros también podríamos tener un impacto positivo en la cultura de RSM.

El crecimiento de un negocio a veces proviene de aprovechar las relaciones correctas. La clave es una comunicación abierta y frecuente. Porque muchos de nuestros negocios viajan de norte a sur, implementamos un sistema de compañerismo. Con un abogado del otro lado de la frontera, cada miembro de nuestro equipo de líderes tiene ahora una vía directa y fácil de hacer preguntas, compartir puntos de vista y aprender sobre oportunidades.

Habiendo celebrado nuestro primer aniversario como RSM Canadá, la calidad y el valor de nuestra integración superó nuestras expectativas. A  través de nuestros esfuerzos concentrados, hemos mantenido nuestra cultura única, al mismo tiempo que aprovechamos la experiencia y recursos para atender mejor a nuestros clientes.

Es una relación construida para durar.